CONTROL DE CALIDAD. SEGURIDAD Y FIABILIDAD

Los sueños no se hacen realidad por casualidad: la planificación y la atención a los detalles es lo que marca, no sólo la diferencia, sino que el camino hacia el éxito. El AC50 no es sólo una idea visionaria. También es un depósito fabricado con tecnología rotacional. El producto final está garantizado por Matteo Gelmi y Samuel Ghilardelli, técnicos de Acerbis del Departamento de Calidad dirigido por Luisa Romano.

La calidad es una especie de ángel de la guarda, presente en todas y cada una de las fases del desarrollo técnico y productivo. Es el amigo con el que siempre puedes contar, la persona que no te abandonará en tu momento de necesidad, es la que se asegura de que en tu mochila siempre haya todo lo que necesitas para hacer frente a cualquier inconveniente, porque en un viaje tan largo no sabes lo que puede pasar. Acerbis, con AC50, da un nuevo paso adelante, partiendo de un Know-How consolidado, pero superando sus límites. Entre las actividades incluidas en el proceso de validación, es fundamental la Prueba de Estanqueidad: sometiendo el depósito a presión, se verifica su integridad y la ausencia de fugas, y la Medición del Espesor. Matteo Gelmi supervisa cada paso, prestando atención a cada detalle.

Prueba de estanqueidad superada con éxito

Solamente falta la última luz verde.

Estamos en el Laboratorio de Calidad de Acerbis, el depósito AC50 está sobre la mesa, esperando el veredicto final.

Samuel Ghilardelli, Técnico de Calidad con más de 100.000 depósitos inspeccionados en su carrera, comienza su meticulosa inspección. Los compañeros que le rodean observan, esperan.

Samuel termina y recoloca la pieza del Magna Mike 8600.

Se gira hacia el equipo con una sonrisa.

Ahora sí que podemos ponernos en marcha.